
DESCRIPCIÓN
Estas albóndigas veganas son una versión adaptada de las famosas «grönsaksbullar de ikea», una sabrosa alternativa para los que no comen productos de origen animal y también, porque no, para los que disfrutamos con una alimentación variada.
Los ingredientes de esta receta no contienen gluten. Por lo tanto, es apta para celiacos e intolerantes a la lactosa o huevos.
Igual que las albóndigas de carne, se pueden hacer con cualquier tipo de salsa, como la de tomate, de almendras, a la pimienta, de quesos…
Solo fritas y sin salsa, son un bocado tierno, muy jugosas y con un sabor delicioso. Una buena opción para que los niños coman legumbres y verduras sin poner mala cara.
Hace unos años publique estas albóndigas de garbanzos de un antiguo recetario menorquín que también están buenísimas.
INGREDIENTES
Para las albóndigas:
400 gr. de Garbanzos cocidos
100 gr. de Guisantes cocidos
75 gr. de Maíz tierno (envasado)
1 Cebolla (200 gr.)
4 dientes de Ajo
150 gr. de Zanahoria
125 gr. de Pimiento rojo
125 gr. de Col rizada
1 pastilla de caldo de Verduras
50 ml. de Aceite de oliva (4 cucharadas)
Sal y Pimienta
Harina de Garbanzos para rebozar
Aceite de oliva para freír.
Para la salsa:
400 ml. de bebida de Soja sin azúcar
1 cucharada sopera de Mostaza antigua
1 cucharada sopera de Cebolla deshidratada
1 cucharada sopera de Harina de maíz (maicena)
Sal y pimienta
PREPARACIÓN
Las albóndigas:
Escurrir el agua de cocción de los garbanzos, los guisantes y el maíz, triturarlos sin llegar a hacer un puré demasiado fino. Reservar.
Pelar y picar la cebolla y los ajos en trocitos muy pequeños.
Pelar y rallar la zanahoria.
Lavar, quitar las semillas y cortar el pimiento en trocitos pequeños.
Quitar las hojas exteriores de la col y cortarla en juliana pequeña.
Poner en una cazuela el aceite y pochar la cebolla y los ajos, cuando empiece a estar transparente añadir la zanahoria, el pimiento y la col, saltear añadir sal, tapar la cazuela y dejar cocinar hasta que las verduras estén tiernas.
Incorporar el puré de garbanzos, guisantes y maíz, la pastilla de caldo de verduras desmenuzada y pimienta al gusto, mezclar con la espátula. Seguir cocinando unos minutos todo junto. Comprobar el punto de sal y añadir más si es necesario.
Apartar del fuego y dejar enfriar. Mejor hacerlo de un día para otro y guardarlo en un recipiente hermético dentro de la nevera.
Hacer las albóndigas cogiendo una porción de masa con una cucharita y darle forma redondeada rebozándolas con la harina de garbanzos.
Poner abundante aceite de oliva en una sartén al fuego y cuando esté bien caliente freír las albóndigas hasta que estén doradas.
Sacarlas a un plato forrado con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.

La salsa:
Poner en un vaso unos 100 ml. de bebida de soja, la mostaza, la cebolla y la harina de maíz, mezclar bien.
Poner el resto de bebida de soja en un cazo y calentar, añadir el resto de ingredientes bien mezclados sin dejar de remover hasta que la salsa empiece a hervir y espese. Salpimentar y retirar del fuego. La textura en este momento no debe ser muy espesa.
Poner las albóndigas en una cazuela, verter la salsa por encima y calentar todo junto hasta que la salsa se vuelva cremosa y algo mas espesa.
Servir calientes.
por favor sigue haciendo recetas alternativas sin carne para variar un poquito, esta receta me gusta más que los famosos falafel con garbanzos crudos que cuesta hacer la digestión. gracias
Marta, mi hija me pidió lo mismo que tu, recetas vegetarianas y veganas 😉 y tengo la intención de publicar unas cuantas recetas al mes.
Gracias a ti por el comentario. Un beso!!!
Hola, magnifica receta….pero no soy de fritos y me pregunto si se pueden hacer al horno y el tiempo que deben estar en él..mas o menos.
Gracias!!
Gracias Isa!!!
Se pueden hornear sin ningún problema, yo creo que con el horno precalentado a 180º (calor arriba y abajo) con 20 minutos será suficiente, gíralas a mitad del tiempo. Cuando estén bien doraditas las sacas.
Un beso!!!