La receta de hoy es la versión de un plato que suelo pedir cuando voy al Restaurante Way en el puerto de Maó.
Si aun no lo habéis probado os recomiendo pedirlo la próxima vez que vayáis.
El sabor dulce del mango y el aroma fresco de la hierbabuena, convierten una simple pechuga de pollo en un bocado exótico y delicioso.

 INGREDIENTES

8 Filetes de pechuga de pollo cortados muy finos
1 Mango grande
Hojas de Hierbabuena
50 gr. de Cebolla picada
50 gr. de Leche evaporada
1 cucharada de Mantequilla
Sal y Pimienta
Aceite de Oliva para freir
Harina de maiz (Maicena)
1 Huevo para rebozar

PREPARACIÓN

Pelar el mango, cortar la mitad en bastoncitos y la otra mitad en trozos pequeños.
La salsa
Poner en un cazo al fuego la mantequilla y la cebolla, sofreír hasta que esté transparente, agregar el mango cortado en trocitos y dejar cocinar hasta que se convierta en puré. Incorporar la leche evaporada, salpimentar al gusto y dejar al fuego un minuto mas.
Retirar del fuego, triturar con la batidora hasta conseguir una textura fina.

Extender los filetes de pechuga y salarlos por los dos lados.
Sobre cada filete poner bastones de mango y encima hojas de hierbabuena cortadas por la mitad. Envolver el mango con el filete de pechuga formando un rollito.
Rebozar los rollitos con la harina y huevo batido, freír en abundante aceite de oliva.

Para servir poner una cucharada de salsa en el fondo del plato y encima los rollitos de pollo con mango. Acompañar con ensalada y el resto de salsa en una salsera.