El salmón admite múltiples preparaciones culinarias. Su carne es firme y sabrosa, pero a la vez delicada y agradable en la boca, debido a su contenido de grasa.
Para poder disfrutar al máximo de la exquisita textura, jugosa carne y delicado sabor del salmón, sólo hay un secreto, no hacerlo demasiado.
Esta receta es muy fácil de preparar y no os llevará mucho tiempo en hacerla… como guarnición, unas setas de cardo salteadas.

 INGREDIENTES

4 filetes de Salmón sin piel ni espinas
50 gr. de Mantequilla
200 ml. de zumo de Naranja
1 cucharada de Whisky
1 cucharada de Miel
1 cucharadita de harina de maíz (Maicena)
Sal y pimienta

PREPARACION

Derretir en una sartén la mantequilla, cuando esté caliente poner los filetes de salmón salados y dorarlos por los dos lados. No hacerlos demasiado, solo lo justo para sellarlos.
Sacarlos a un plato y reservar.
Añadir a la mantequilla que queda en la sartén, 150 ml. de zumo de naranja, la cucharada de whisky y la miel, calentar hasta que empiece a hervir y se evapore el alcohol del whisky.
Disolver en los 50 ml. restantes de zumo de naranja la cucharadita de maicena, verter en la sartén, salpimentar al gusto y remover hasta que la salsa espese.
Apagar el fuego, poner los filetes de salmón en la salsa y tapar.
Dejar reposar 5 minutos para que el salmón se caliente y termine de hacerse por dentro.

Emplatar y servirlo caliente acompañado de setas de cardo salteadas y unas rodajas de naranja a la plancha