Hoy quiero enseñaros una sencilla manera de preparar un aperitivo.
Con este tipo de marinado se consigue que el pescado pierda parte del agua que contiene y la textura sea firme sin recordar al pescado crudo. Para mí con dos horas hay suficiente, pero todo dependerá del gusto de cada uno.
Recomiendo que los filetes de pescado tengan como mínimo 2 cm. de grosor, porque si se hace más fino el resultado es pescado seco y salado.



INGREDIENTES

250 gr. de Salmón fresco (2 cm. de grosor)
250 gr. de Atún fresco (2 cm. de grosor)
300 gr. de Preparado para ahumados (Mercadona)
Se puede hacer una mezcla con 200 gr. de sal gorda, 100 de azúcar y una cucharada de eneldo seco si no se dispone del preparado de Mercadona.
Aceite de Oliva Virgen Extra
Cebollino
Semillas de Sésamo

Pequeñas florecillas para decorar (opcional)

PREPARACIÓN

Limpiar los pescados de piel y espinas si las tuviesen. Congelarlos durante dos días como mínimo. Descongelar la noche anterior poniéndolos en la nevera.
Poner en un recipiente la mitad del preparado para ahumados, colocar los filetes de salmón y atún encima y cubrir con el resto del preparado. Tapar el recipiente y dejar reposar durante dos horas en la nevera.
Pasadas las dos horas sacar los pescados del preparado y lavar bajo el chorro de agua fría. Secarlos delicadamente con papel de cocina.
Untar ligeramente el salmón con aceite de oliva y espolvorear con el cebollino picado fino por encima. Cortar cuadraditos y colocarlos en una bandeja o cucharitas individuales..
Untar ligeramente el atún con aceite de oliva y espolvorear con las semillas de sésamo por encima. Cortar cuadraditos y colocarlos en una bandeja o en cucharitas individuales.

Colocar encima de los taquitos unas florecillas para darles color.

Nota: Si queréis hacerlo con antelación o sobra, se puede conservar unos días en la nevera metido en un recipiente hermético y cubierto con aceite de oliva.

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