Tres ingredientes que en casi todas las cocinas suelen haber y que juntos hacen un plato apetitoso y sencillo.
No hace falta ponerle sal, por que las patatas absorben todo el sabor del queso y si como en mi caso es semi curado, ni siquiera aceite.
Está bueno tanto recién hecho como frío.
INGREDIENTES
(cuatro raciones)
500 gr. de patatas
200 gr. de queso rallado (yo usé semi curado de Mahón)
4 lonchas de Jamón dulce
Aceite de Oliva
Pimienta (Opcional)
PREPARACIÓN
Pelar las patatas y cortarlas con mandolina o cuchillo en rodajas muy finas. Lavarlas y reservar.
Forrar un molde (20 x 20) con papel vegetal, engrasarlo con aceite de oliva.
Colocar las patatas superponiéndolas, en la base y los lados del molde.
Poner sobre la base de patatas dos lonchas de jamón dulce, encima queso rallado, otra capa de patatas, otra vez jamón dulce, queso, patatas y por último cubrir con más queso rallado. Espolvorear con pimienta recién molida (al gusto)
Precalentar el horno (solo la parte de abajo) a 170º y meter el molde durante 45 minutos. Comprobar que las patatas están tiernas pinchando con una brocheta.
Tiene una pinta fenomenal.Voy a hacerla el sabado que viene a comer «la tropa».Gracias,ya te contare.