El relleno de estos tomates no es otro que el de la popular Quiche Lorraine y de ahí que le haya puesto este nombre.
Desde hace años en mi casa comemos los tomates pelados y así lo explico en la receta, pero no es necesario hacerlo si no os molesta la piel. Es importante que el tomate esté maduro y de carne muy firme para que al hornearlos no se rompan.

INGREDIENTES

4 Tomates grandes (para ensalada de carne firme)
100 gr. de Jamón dulce o Bacón
100 gr. de Queso rallado
2 Huevos
100 gr.  de Leche evaporada
Sal y Pimienta
Aceite de Oliva

PREPARACION

Pelar los tomates con un cuchillo muy afilado, quitando solo la piel y sin dañar la pulpa.
Cortar la parte de arriba y vaciar el interior con una cucharilla o un sacabolas de frutas. Reservar la pulpa para otras recetas, yo la trituré para untar en el pan.
Ponerlos boca abajo para que suelten el liquido que les pueda quedar.
Poner dentro de los tomates el jamón cortado en trocitos pequeños, después el queso y por último los huevos batidos con la leche evaporada y salpimentados.
Poner un chorrito de aceite en una bandeja y colocar los tomates y sus tapas.
Meter en el horno precalentado a 180º durante 15 minutos. Comprobar que el relleno  está cuajado pinchando en el centro con un palillo y este salga limpio.

Servir calientes.

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