En Alemania las torrijas se llaman Arme Ritter (caballeros pobres). Los franceses llaman a su versión pain perdu (pan perdido).
Los ingleses llaman a algo parecido poor knights of Windsor.
Para los norte americanos las torrijas se llaman French Toast. Los Suizos les dicen Fotzelschnitten. Los Austriacos y Bávaros Pofesen o Pavesen.
En Portugal las torrijas tienen el nombre Rabanadas, típico dulce de Navidad que se come en la Noche Buena y durante las fiestas.
En Colombia, Chile, Ecuador y Guatemala se llaman tostadas francesas, en la frontera norte de México pan francés, en Argentina y Uruguay torrejas.
En Sevilla es típico hacerlas con vino y miel.
De la manera que sea como se les llame y aunque son muchas las variantes a la hora de preparar unas torrijas, todas ellas tienen en común y como ingredientes principales el pan asentado, la leche y los huevos.

INGREDIENTES

1 barra de Pan para hacer torrijas
400 ml. de Vino Blanco
400 ml. de Agua mineral
3 Huevos
La cáscara de un limón
500 ml. de Aceite de Oliva

Para bañarlas:
400 gr. de Miel
150 ml. de vino Blanco

PREPARACIÓN

Cortar el pan en rebanadas de un centímetro y medio.
Mezclar los 400 ml. de vino y los 400 ml. de agua y calentar sin que llegue a hervir. Dejar templar.
Batir los huevos y añadir un chorrito de vino para que no hagan espuma al freír las torrijas.
Remojar el pan en la mezcla de vino y agua templados durante unos minutos hasta que esté bien empapado (el pan especial para torrijas no se deshace si está mucho rato en remojo), sacarlo con cuidado con una espátula y ponerlo sobre una rejilla para que escurra el exceso de líquido.
Poner el aceite y un trozo de cáscara de limón en una sartén al fuego, calentarlo sin que llegue a humear.
Con la espátula meter las torrijas en el huevo y bañarlas, escurrir el exceso y freírlas en el aceite caliente dándoles la vuelta para que se doren por los dos lados. Sacarlas y ponerlas sobre papel de cocina para que escurran el exceso de aceite.
Freír todas las torrijas cambiando el trozo de cáscara de limón según se vaya quemando, esto hará que las torrijas no sepan demasiado a aceite.
Colocar las torrijas extendidas en una fuente.
Poner la miel y los 150 ml. de vino en un cazo, hervir durante un par de minutos y bañar las torrijas con esta mezcla caliente. Dejarlas enfriar y a disfrutar.

Pin It on Pinterest

Share This