Para que este postre tan tradicional sea un éxito…
Es necesario que las peras estén maduras pero con la carne firme (para mi gusto la variedad blanquilla es la ideal).
Que la cocción sea a fuego muy lento sin que llegue a hervir.
Que el reposo de las peras dentro del vino sea de al menos 24 horas.
La fina capa de chocolate crujiente que envuelve las peras y la suavidad de las natillas hacen que este postre sea delicioso…

INGREDIENTES

6 Peras Blanquillas
Medio litro de Vino Tinto (yo usé un rioja)
75 gr. de Azúcar
Una cucharada de esencia de Vainilla
1 cucharadita de Pimienta de Jamaica (All Spices)
1 pieza de Anís Estrellado
La cascara de media Naranja

150 gr. de Chocolate Fondant
Medio Litro de Natillas
Hojas de Hierba buena

 PREPARACIÓN

Pelar las peras dejándoles el rabito.
Poner en un cazo donde quepan justas las peras, el vino con el azúcar, la esencia de vainilla, la pimienta de Jamaica, el anís estrellado y la cascara de naranja. Llevar a ebullición y dejar hervir 5 minutos. Con la ayuda de una cuchara ir poniendo las peras dentro del vino y bajar el fuego al mínimo, dejándolas hervir tapadas, durante una hora a fuego muy lento.
Retirar del fuego y enfriar. Es mejor hacerlas de un día para otro, para que las peras reposen dentro del vino.
Sacar las peras del vino, dejarlas escurrir y limpiarlas con papel de cocina.

Fundir el chocolate en el microondas o al baño maría, bañar las peras y quitarles el exceso de chocolate por la parte de abajo, ponerlas encima de un plato forrado con papel vegetas y dejarlas enfriar en la nevera hasta que solidifique el chocolate. 
Para servir poner tres cucharadas de natillas en el fondo del plato y en el centro una pera bañada en chocolate y con unas hojitas de hierbabuena para decorar.