El resultado me ha gustado, es un postre ligero al paladar, no al estómago… por la cantidad de materia grasa que contiene…

INGREDIENTES

200 gr. de Café espreso
50 gr. de Amaretto (licor de almendra)
6 Yemas de Huevo
125 gr. de Azúcar Glass
500 gr. de Queso Mascarpone
500 gr. de Nata para Montar
Una cucharada de Esencia de Vainilla
4 hojas de gelatina
Cacao en polvo
Dos bases de bizcocho
Fresas y Hierbabuena

PREPARACIÓN

Mezclar el café con el Amaretto, añadir azúcar al gusto, mezclar bien y dejar enfriar.
Poner en remojo en agua fría la gelatina.
Calentar 100 gr. de nata y disolver en ella la gelatina. Reservar.
Batir 400 gr. de nata hasta que tenga consistencia semimontada.
Batir las yemas y el azúcar glass, hasta que estén cremosas y blanquecinas. Añadir la esencia de vainilla y el mascarpone. Mezclar bien.
En un bol grande poner la gelatina tibia, incorporar la crema de yemas y queso, mezclar bien. Añadir la nata y volver a mezclar con movimientos envolventes para que no baje la nata.

Colocar en un molde rectangular una plancha de bizcocho y calar con el café, poner la mitad de la crema y cubrir toda la superficie.
Sobre la crema poner otra plancha de bizcocho, volver a calar con el café y extender encima el resto de crema.
Meter en la nevera y dejar enfriar. Mejor si se hace el día anterior.

Antes de servir espolvorear por toda la superficie una generosa capa de cacao y colocar encima rodajas de fresas y una hojas de hierbabuena.