Las fresas, uno de los principales frutos de la primavera, son un alimento muy sabroso y nutritivo, muy ricas en vitamina C, tienen virtudes anti anémicas y reconstituyentes, muy adecuadas en época de crecimiento, capaces de inhibir sustancias cancerígenas que puedan atacar a las células sanas, contienen mucho acido salicílico, por lo que pueden considerarse como “una aspirina natural”, el ácido ascórbico, lecitina y pectina que contienen la hacen ideal para reducir el colesterol de la sangre.

La temporada de fresas se alarga desde finales de marzo hasta finales de agosto y debería estar presente en nuestra dieta habitual  por sus propiedades nutritivas y dietéticas.

 INGREDIENTES

Para cuatro personas:
Brotes tiernos de Lechuga
250 gr. de Fresas
Medio Aguacate grande
150 gr. de Queso de cabra (o cualquier otro tipo de queso)
1 plancha de pan de molde sin corteza rectangular
Aceite de Oliva Virgen Echioliva
Crema de Balsámico
Sal y pimienta

PREPARACIÓN

(1).- Poner la plancha de pan entre dos hojas de papel vegetal y aplanarla con el rodillo. Cortarla a lo largo en cuatro tiras.
(2).– Colocarlas dentro de moldes para emplatar untados con aceite de oliva y mojar los extremos de las tiras de pan para unirlas presionando con los dedos.
Los moldes se pueden hacer con papel de aluminio o papel vegetal, dándoles la forma deseada.
Poner los moldes en una bandeja, meter en el horno precalentado a 180º durante 10 o 15 minutos.
Sacar del horno, dejar enfriar y desmoldar.
(3).- Lavar las fresas, secarlas, quitar las hojitas y cortarlas en cuadrados pequeños. Reservar 4 enteras para decorar.
Pelar el aguacate y cortarlo también en cuadrados, mezclar con las fresas y salpimentar.
Quitar la corteza del queso y cortar en cuadraditos.
(4).- Poner en la base del plato hojitas de lechuga de forma decorativa alternando los colores. Cortar las fresas reservadas en cuatro trozos y ponerlas sobre las hojas más oscuras. Colocar un molde de pan en el centro, llenarlo con las fresas y aguacate cortados, poner encima el queso y aliñar con unas gotitas de crema de balsámico y aceite de oliva.