En la mayoría de recetas tradicionales el origen es casi siempre anecdótico y poco claro… yo me quedo con estas dos posibles historias:

La magdalena de Commercy debe su nombre a una joven criada llamada Madeleine Paulmier, que en 1755 elaboró estos pastelitos para el rey de Polonia Stanislas Leszczynski, que tenía allí un palacio. Esta tradición es todavía muy popular hoy en día.

Otras fuentes las remontan a la época de los peregrinajes a Santiago de Compostela. Una joven llamada Magdalena les servía a los peregrinos unos pastelitos en forma de concha, símbolo de este peregrinaje. Las «magdalenas» se extendieron a lo largo de los caminos de Santiago, lo que explica su tradicional implantación en España.

INGREDIENTES

(para 18 magdalenas)

73 gr. de Azúcar Glass
Ralladura muy fina de la piel de media naranja
67 gr. de Mantequilla
47 gr. de Harina normal
1 cucharadita de Levadura química (Royal)
17 gr. de Cacao en polvo
27 gr. de Almendras molidas
Una pizca de Sal
2 Huevos

PREPARACIÓN

Derretir la mantequilla en un cazo hasta que tenga un ligero tono dorado sin que llegue a quemarse, retirar del fuego y pasar por un colador fino. Con este proceso la mantequilla adquiere un ligero aroma a avellana. Dejar enfriar
Tamizar la harina y mezclar con el cacao, la levadura, la almendra y la sal. Reservar.
Poner en un recipiente el azúcar y la ralladura de naranja, con los dedos mezclarlos hasta que el azúcar esté algo humedecido y haya cogido el aroma de la naranja. Añadir los huevos y batir hasta que quede una mezcla espumosa. Agregar la mantequilla y la mezcla de harina, removiendo con cuidado hasta que quede una mezcla homogénea.
Dejar reposar la mezcla en el frigorífico durante unas horas.

Engrasar los moldes con mantequilla, en el caso de que no sean de silicona y repartir la mezcla.
Meter en el horno precalentado a 180º durante 10 minutos.

Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.

-Del recetario de Larsvontrier